Para nadie es un secreto que una de las preocupaciones más comunes de la mayoría de los dueños de automóviles es encontrar un estilo de conducción que les permita ahorrar combustible. Esta preocupación ha hecho que muchos de los vehículos de nueva generación tengan sistemas cada vez más precisos para mantener bien informado de esto al conductor durante todo el recorrido.
Pero, a decir verdad, no es necesario que tengamos un vehículo de última generación para que podamos ser conductores más eficientes. El consumo de combustible depende mucho de nuestros hábitos en el volante, por eso hoy te traemos 9 formas de ahorrar combustible.
- Conoce bien la ruta y planifica el viaje
La prevención es uno de los mejores hábitos que podemos tener como conductores. Si nos tomamos el tiempo necesario para estudiar la ruta de todos los días o la que pensemos utilizar en las vacaciones, es probable que podamos encontrar la mejor manera de ahorrar combustible y cubrir el recorrido en buen tiempo.
También es buena idea probar vías alternativas dentro de la ciudad. Si bien siempre es muy conveniente usar las principales arterias viales para ir al trabajo, también tenemos que estar conscientes que el tránsito será inevitable.
- Cuidado al calentar el motor
A pesar de lo que consideran muchas personas, no es necesario tener que presionar el acelerador en el preciso momento que ponemos el auto en marcha. Una forma efectiva de hacer esto es encender el vehículo, dejar que el motor adquiera temperatura y presionar un poco el acelerador para que el combustible circule.
Si tienes por costumbre aplicar más fuerza de la debida en el acelerador al momento de calentar el vehículo, será algo difícil que logres ahorrar combustible de forma eficiente.
- Usa adecuadamente la palanca de cambios
La destreza y el uso inteligente de los cambios en los autos sincrónicos son detalles que cobran mucha relevancia a la hora de ahorrar combustible. Una buena idea es cambiar a la segunda justo después de 2 segundos que el auto empiece a desplazarse.
Otro truco que te será de gran utilidad es que procures mantenerte siempre en los cambios más altos de la marcha, procurando exigirle lo menos posible al motor. Te sorprenderá cuánto ahorrarías en combustible, y también el buen tiempo harás si te desplazas entre la 4ª o 5ª marca a baja velocidad.
- Desplázate siempre a una velocidad constante
Todos los automóviles están diseñados para alcanzar una velocidad óptima en donde cada una de las partes trabajan de forma armoniosa sin desgastarse ni trabajar demasiado. En la mayoría de los autos particulares, esa velocidad de crucero difícilmente puede ser mayor que los 60km/h.
Un vehículo que se desplaza en su rango de velocidad óptima, es un automóvil que tiene unos frenos que reaccionan mejor, un motor que no trabaja demasiado exigido y nos brinda la oportunidad de ahorrar combustible.
- Nada de peso extra
Aunque pueda parecer algo sorprendente, la cantidad de peso dentro del vehículo puede llegar a tener una repercusión importante en algunos factores, como por ejemplo, el gasto de combustible. Por eso siempre resulta conveniente hacer un replanteo de la cantidad de maletas que podríamos utilizar y qué tantas cosas necesitamos realmente durante las vacaciones.
También es vital estar muy conscientes de la cantidad de peso que anexamos a nuestro automóvil en nuestro día a día. De hecho, no siempre es buena idea que el vehículo se desplace al máximo de su capacidad de pasajeros todos los días.
- La presión de los neumáticos también es importante
Para que un automóvil nos brinde la oportunidad de desplazarnos de forma eficiente, es importante que como dueños estemos siempre al pendiente de que este siempre se encuentre en óptimas condiciones. Una de las responsabilidades que involucra tener un auto, es asegurarnos que los neumáticos siempre tengan una buena presión de aire.
Un vehículo que se desplaza con cantidad insuficiente de aire en los neumáticos, es un auto que requiere de más energía de parte del motor para poder avanzar. Si pretendemos ahorrar combustible, entonces debemos evitar esta situación a toda costa.
- Deja que el motor te ayude a frenar
Aunque pueda parecer algo que no tiene relación con el tema, si aprendemos a utilizar debidamente el pedal del freno, esto podría ser de gran ayuda para ahorrar combustible. Al igual que con el acelerador, la fluidez y frecuencia con la que utilizamos los frenos influyen sobre la demanda de energía que recibe el motor de nuestra parte.
Un dato que puede serte de gran ayuda es entender que si dejamos de inyectar combustible, esto hará que el vehículo empiece a disminuir su velocidad y, por lo tanto, mejorará la respuesta de los frenos. Retirar por completo el pie del acelerador y después aplicar el freno con suavidad luego de unos segundos permitirá detener el coche de forma suave y reducirá considerablemente el gasto de combustible.
- Conoce bien el terreno por donde te desplazas
Cada camino cuenta con sus propias características, está de nuestra parte como conductores conocer cuáles son y de qué manera podemos sacarle provecho de ellas. Una carretera larga y con curvas no muy pronunciadas, es un lugar donde puedes desplazarte a unos razonables 80 km/h y hacer un tiempo considerable sin exigir mucho al motor.
Las calles ligeramente inclinadas pueden convertirse en las mejores amigas de los conductores que les gusta ahorrar combustible. La inercia experimentada en el descenso permite que el vehículo se desplace con mayor soltura, esto es conveniente para hacer los cambios de marcha de forma menos violenta.
- Aprende cuándo usar el aire acondicionado y cuando bajar las ventanillas
Saber en qué momento resulta mejor encender el aire acondicionado y cuándo bajar las ventanillas es un detalle que parece algo sin importancia, pero puede ayudarnos a ahorrar combustible de forma considerable. Dentro de las ciudades es necesario hacer mucho uso del freno, la palanca de cambios y el acelerador para desplazarnos, por lo tanto, es mejor ir con las ventanillas bajas.
Ahora, el desplazarnos por carretera con las ventanillas abajo incrementa considerablemente la resistencia al viento del vehículo y, por ende, requiere de más energía para desplazarse. Así que, en tu próximo viaje por carretera, en lo que sientas calor sabes que puedes encender el aire acondicionado sin ningún remordimiento.
Comentarios recientes